H

Querido amigo,

Estoy pensando. He estado pensando por eones. Estoy flotando entre dos horizontes. Uno me ofrece susurros de amor perdidos en las sombras de un cuerpo. El otro propone lo claramente imposible, mientras me invita con sus brazos abiertos. Estoy dividido. La dirección de mi vuelo me elude. Pienso porque me atemoriza la aniquilación si dejo de pensar.

Mis pensamientos se pasean entre dos horizontes. ¿Acaso existen por mí? o ¿será que existen a pesar de mí? No recuerdo otro lugar. Quizá he estado deambulando aquí eternamente. Mi destino, al filo de la decisión entre los dos horizontes.

No hay límite de tiempo para mi decisión. Sin embargo, hay algunos tratando de animarme para que apresure mi camino. Un instinto tan primitivo que me pregunto su origen.

¿Había algo más que esto? No puedo recordar. Mi foco se vuelve uno con mis horizontes. Una decisión muy seria flotando. Siento que la decisión va a llegar. Me siento lleno de contento. Intento dejar que el destino haga lo suyo. Me doy cuenta de la futilidad de todo esto y decido. Los brazos abiertos de la imposibilidad me abrazan. Me volteo para ver las sombras por última vez. Me dejan ir con amor. Me siento triste por dejar mi cuerpo atrás. De algún modo sabe el proceso, retorna al polvo para renacer otra vez.

Estoy pensando y el pensamiento se vuelve una melodía que me lleva al horizonte. El darme cuenta de la eternidad me reboza. Pasé a esta nueva perspectiva. Mis imágenes se materializan delante de mí. Recuerdo ahora que esto es lo que llaman muerte. Estoy pensando y es maravilloso.

H.