Querido amigo,
He estado en las sombras por
tanto tiempo. Los bordes de la oscuridad siempre en la punta de mis dedos. He
visto el sol y me he maravillado de su magnificencia. He leído toda la
filosofía de la condición humana, mas me trancé por lo que puede ser mío y lo
que no puede ser. Entonces, ahora este es el fin de mi existencia. Las sombras
se profundizan en mí. En mis momentos finales me siento engañado. El brillo de
la vida siempre tan cerca, pero fuera de foco. ¿Cómo pude estar tan equivocado?
Maldiciendo la fuerza de vida que ahora se sale de mí, siento mis pulmones
vaciarse por última vez. Mi rabia por la injusticia de todo salió al frente
como un final atentado contra la vida. Claro que fue sin éxito. La ira pasó a
ser parte de mi esencia. Horrible panorama cuando estás muerto de verdad. La
ira se manifiesta a sí misma antes de levantar su fea cabeza. Su tono de burla
me dice que hubiera sido mejor soltarla en vida.
De repente me doy cuenta de
lo que las sombras habían tratado de decirme. Ellas existían solo porque yo las
dejé. Qué difícil es enfrentar tus propias creaciones, especialmente cuando
son tan negativas. Me siento avergonzado. Ahora espero la oportunidad para
disipar las sombras y la ira. Este lugar de espera donde actualmente existo
sostiene una promesa de salvación. Debo regresar para cambiar el curso de la
marea. Retornar a lo físico. Algo que nunca quise, pero ahora siento un
profundo anhelo. Cierro mis ojos y me resbalo entre las sombras.
Voy a renacer,
Eric
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